viernes, 9 de diciembre de 2011

Carta Para Un Amor Imaginario...


Hola… se que no sabes quien soy, ni como es mi nombre, ni que hago, ni de donde vengo, ni a donde voy… sin embargo, he querido dedicarte estas líneas que hoy divagan en mi cabeza cual enjambre de abejas enajenadas…
            Posiblemente consideres una locura el hecho de que un hombre hable solo, pero en este momento no lo estoy haciendo, te estoy hablando a ti… a ti que sé que estás ahí, en algún lugar, escondida, apacible, inmutable, casi inerte, esperando ser descubierta, tal cual como un continente virgen antes de la llegada de los colonizadores…
            Si toscas te parecen mis palabras, espero sepas comprender que no es fácil, nunca le he abierto mi corazón a ninguna mujer, así como hoy pretendo hacerlo contigo, talvez por miedo, talvez ignorancia, talvez por orgullo, o talvez por una combinación de todas las anteriores.
            Son pocas las cosas que puedo decir de mí, pues solo un simple ser humano soy, y no tengo pretensiones de parecer mas ni menos ante ti, ni ante nadie más, pues el tiempo, sabio y paciente, siempre se encarga de desenmascarar las mentiras y exponer a la luz del sol todas y cada una de las falsedades que pueda alguien decir para caer en gracia de otra persona.
            Soy un hombre sumamente imperfecto, mis manías y defectos a veces no tienen comparación, soy orgulloso, terco, insufrible, celoso, temperamental, impredecible, intenso, llorón, lento, un poco caído de la mata,  suelo encerrarme en mis cuatro paredes cuando me siento acorralado, presionado o simplemente decepcionado, no puedo dormir si algo me molesta, cuando duermo… ronco, soy la personificación del típico Piscis, soñador en demasía, sumamente impresionable, con una facilidad inmensa de pasar de la alegría a la tristeza en un abrir y cerrar de ojos, mi sentimentalismo raya en lo absurdo, y mi único escape es la escritura…
            He pasado por muchas relaciones, para ser sincero, nadie me ha aguantado, y posiblemente tu, al leer esto pensarás: “¿Y si eres así, porqué te molestas en escribirme? Sabes que poco menos que nunca atenderé a tu llamado…” Lo sé… es una contradicción, es la plena ironía de la vida plasmada aquí, Sin embargo, no quiero que el día de mañana los reproches salgan a flote solo por la falta de sinceridad de mi parte al escribirte estas burdas palabras que espero que algún día leas.
            No escondo lo que soy, ni en las buenas ni en las malas, y por eso, simplemente por eso no quiero medias verdades o verdades ocultas que nublen mi hidalguía, pues si de algo estoy completamente seguro es que soy un hombre cabal y responsable por mis actos, No soy perfecto, y nunca lo seré, pero algo si te puedo asegurar, es que estando a mi lado nunca faltará una sonrisa en tus labios, seré esa voz escondida que otros llaman conciencia para hacerte pensar dos veces las cosas cuando considere que has cometido un error, yo por mi parte sabré reconocerlo cuando sea yo quien falle, de eso no tengas duda, seré tu mayor razón de alegría, tu orgullo, tu hombre…
            Solo soy un poeta que quiere quererte, un escritor que quiere escribirte, un cantante que quiere cantarte, solo soy un grano de arena en el inmenso mar, solo soy un hombre que quiere ser feliz, que alguien me haga sonreír sin motivo ni razón, Alguien que no trate de analizarme, que no pretenda juzgarme, que me quiera tal cual como soy, sin limites, barreras o tabúes, que no espere más de lo que está conciente que puedo darle, quiero alguien que no me hiera, que se apiade de mi en los momentos de tristezas y disfrute a mi lado todos los maravillosos momentos de alegría, que comprenda que nada fácil vale la pena, que no tenga miedo de luchar a mi lado para sacar adelante una relación por muy difícil o tambaleante que ésta sea, quiero a mi lado una mujer que me respete, que sepa que somos diferentes, y cada quien tiene formas distintas de ver la vida y hacer las cosas, quiero que me regañen cuando me porto mal, pero que también sepa reconocérmelo cuando lo hago bien…
            Quiero sentirme amado sin barreras ni fronteras, sin espacios ni tiempo, que se arriesgue conmigo a descubrir cosas y situaciones nuevas, quiero a alguien que me haga mejor persona, que me critique, pero no de forma destructiva e impertinente, sino de manera cálida, amorosa y cordial, para así sentir que su sinceridad me ayudará a evolucionar como ser humano, como pareja y como miembro de una sociedad, Necesito una mujer fuerte que me apoye en mis decisiones y que no tenga miedo al que dirán, que no viva de pasados, sino que trabaje duro a mi lado para construir en este presente bases sólidas que nos sostengan en un futuro, quiero saber que aunque no la vea ella piensa en mi, quiero que sepa que aunque no la vea pienso en ella, que me extrañe, que sienta necesidad de estar conmigo, y que no sea solo un compromiso adquirido al cual debemos guardarle ejecución castrense, quiero que ria conmigo de las más mínimas estupideces, que no se guarde sentimientos para ella, sino que por el contrario sepa expresarlos de manera abierta y sincera, porque todos necesitamos escuchar de boca de la persona amada, ese “Te quiero” que tu también sientes por ella.
            Quiero una mujer que por encima de todas las cosas sepa perdonar, que en algún momento de rabia o decepción no se deje llevar por sentimientos malsanos, que me escuche, que me deje expresar mis disculpas y me permita enmendar mis errores, que no tire a la basura todo simplemente por orgullo o por impulsividad, que entienda que nunca jamás haré algo en mi plena conciencia para herirla, y si ha pasado, tenga la bondad de no etiquetarme y satanizarme, quiero alguien que vea más allá de una pelea, que no se cierre al dialogo fraterno en esos momentos de adversidad, quiero poner en sus manos mi corazón entero, y que ella lo trate como realmente él se lo merece, que sepa que la vida no es rosa, pero tampoco es un eterno infierno, que sea optimista y segura de nosotros por encima de todo, que entienda que una relación no puede ser basada en reproches ni en estúpidos orgullos que solo cercenan las posibilidades de crecer, mejorar y ser felices…
            Se que no sabes quien soy, ni como es mi nombre, ni que hago, ni de donde vengo, ni a donde voy… sin embargo, yo sé que tu eres esa persona que busco, y sé que te he descrito al pié de la letra, y yo se que existes, no se en donde, talvez solo en mi cabeza, pero existes, así seas solo un “Amor imaginario”